18 junio, 2006

Palacios llenos a rebosar


Palacios llenos de inútiles y consortes y allegados y nietos y servicio en exceso y administradores de no sé qué cosas y .......... Demasiada gente para nada o casi nada.
Juro que dejé de ser monárquico... cuando me enteré que los Reyes Magos eran los padres.
Ahora, traumatizado desde la más tierna infancia, no sé si me casaría con una princesa.
Tendría que ser una auténtica lujuriosa, además de estar buena, claro.